Muy bien, muy bien, muy bien, muy bien, muy bien… muy bien.
Cuando uno repite una palabra muchas veces ésta acaba perdiendo sentido. Sin embargo, si la escribo muchas veces siento que enfatiza su significado. Aunque probablemente el nivel de énfasis llegó a su tope en el tercer “muy bien”.
Lo cual no debe desanimar a nadie, ni siquiera a los otros tres “muy bien” que le siguen, ya que aunque su presencia no es requerida, están ahí… acompañando, haciendo bola, conviviendo. Menos el último “muy bien”. Ese se encuentra como que lejos… separado. Tal vez esté teniendo un mal día. O simplemente es más tímido que los demás. No hay forma de saber que tan cercano es al resto de los “muy bien”. Incluso, puede que su única razón por estar separado sea que le gusta hablar cuando todo mundo ha callado ya.
Cualquiera que sea la razón, yo la aceptaré. Finalmente el se encuentra ahí. Hay otros “muy bien” que ni siquiera fueron… unos que ni siquiera existen. Ahora bien, ya sabemos su rol y más o menos qué tipo de actitud traen; pero aún desconocemos la razón de su amistosa junta. O si en realidad tiene que ver con amistad.
Existe la posibilidad de que todos ellos formen parte de una asociación civil de “muy bien”s y aunque cooperan todos para alcanzar un mismo objetivo puede que su relación sea meramente “profesional”. Claro, que si le metemos un poco de intriga, podemos escribir toda una novela de inter relaciones personales entre los jóvenes “muy bien”.
Yo decidí que sean “jóvenes”. Eso sí fue totalmente arbitrario. Es simplemente que para mí es más fácil relacionarlos con usted, lector, si los hago “chavos”. ¿Quién de ustedes sabe lo que pasa en la mente de un “muy bien” en sus cuarentas? Yo, definitivamente no.
No es una caja negra, pero pues es más difícil, más lejano… más ficticio. En fin, volvamos a lo que nos concierne el día de hoy. Así nada más de entrada yo te puedo decir que el muy bien #2 tiene un cierto tipo de respeto formal por el Muy bien #1, que no por nada empieza con mayúsculas. El muy bien #5 se encuentra perdidamente enamorado del muy bien #4, pero nunca ha tenido la oportunidad de decírselo. Y por ahí me cuentan que el muy bien #3 tal vez nunca vuelva a ver al muy bien #6, a pesar de que se han visto cada viernes durante los últimos tres años.
Las posibilidades son muchas; pero la situación actual así es. La verdad es que si se encuentran en una reunión amistosa.
Chavo mode on
Todos están por ahí juntos en el cantón del muy bien #3 y andan viendo que se arma. Hoy se celebra el “grito” y pues yo diría que todos traen como que ganirris de agarrar el pedo (aunque para muchos el pedo es que termina agarrándote ;) ). Total que no saben qué onda, pero pues hay que desquitar el asueto.
Mientran empiezan a ver qué onda, el muy bien #5 saca su ipod para amenizar al bandón. Tiene una selección muy variada. Música actual principalmente. Aquí el diagrama:
Música actual:
_--------------_____
Pay
¿Qué onda? Tirando chopo con la gráfica o que o que….
Bueno, de aquí ya pasa lo que siempre pasa. Usted escoge a su muy bien favorito y le hace una historia. Puede ser una comedia, un drama una aventura de proporciones épicas o la vida más mundana del mundo (ay ay, ni que la tuya fuera tan extravagante).
Ya tienen el principio, y pues el final también (si se lo saben ¿no?). Entonces nomás es meterle amor a lo de en medio (that’s what she said!)….
Chavo mode off
Platíquenme de sus muy bien. Puede que ustedes tengan ahí en su regazo al #7 o incluso al #18. Si quieren preguntarme del 1 al 5, pues también son bienvenidos.
La cosa es tranquila.
Martes tranqui, Fede tranqui, todos tranqui.
0 comments:
Post a Comment